Page 80 - MONOGRAFIA 25, de Esclerosis multiple
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 FACTORES AMBIENTALES
DE LA ESCLEROSIS MÚLTIPLE
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EUCARYA
ANIMALIA
CHORDATA
MAMMALIA
PRIMATES
HOMINIDAE
HOMO
SAPIENS
DOMINIO REINO FILO CLASE ORDEN FAMILIA GÉNERO ESPECIE CEPA
BACTERIA
EUBACTERIA
FIRMICUTES
BACILLI
LACTOBACILLALES
LACTOBACILLACEAE
LACTOBACILLUS
CASEI
DN114001
   Figura 1. Niveles taxonómicos de los seres vivos. Ejemplos de especies (cepas) familiares de eucariotas (H. sapiens) y procariotas (L. casei DN 114001; Actimel®).
El intestino grueso es la zona más densamente poblada del TGI (1011-1012 UFC/g). Allí el tránsito se ralentiza favoreciendo la actividad de las poblaciones residentes capaces de degradar nutrientes no digeridos en regiones anteriores.
La microbiota fecal constituye el 60% del contenido fecal sólido e incluye miles de especies bacterianas distintas. Destaca la presencia de microorganismos anaerobios, repre- sentados en un 99% por miembros de los filos Firmicutes y Bacteroidetes(8). Los géneros más representativos son Bacteroides, Bifidobacterium, Eubacterium, Clostridium, Peptococcus, Peptostreptococcus y Ruminococcus(8). Entre los anaerobios facultativos (< 1% microbiota intestinal) destacan la familia Enterobacteriaceae y los géneros Enterococcus y Lactobacillus.
La microbiota del intestino grueso se ha descrito como específica de cada individuo y relativamente estable una vez alcanza su equilibrio (en torno a los 2-3 años de edad). A pesar de la gran variabilidad individual de la microbiota, se han descrito 3 “enterotipos” distintos entre la población “sana”. Cada uno de estos enterotipos se caracteriza por la presencia de un pequeño grupo de especies bacterianas dominantes y muchas otras en pequeñas cantidades. Se considera que las especies dominantes son responsables de la presencia de especies minoritarias que, a su vez y a pesar de su escasa representación, pue- den tener funciones determinantes para el mantenimiento de la salud del hospedador.
• El enterotipo 1 está enriquecido en los géneros Bacteroides y Parabacteroides.
• El enterotipo 2 en Prevotella y Desulfovibrio.
• El enterotipo 3 en Ruminococcus y Akkermansia.
Cada enterotipo tiene preferencia por el uso de unas determinadas rutas metabólicas
para la obtención de energía. A pesar de las diferentes composiciones de cada uno de los enterotipos, se considera que existe una redundancia funcional entre ellos y entre el 25 y el 43% de las funciones enzimáticas son compartidas entre enterotipos.
La microbiota inicia su colonización desde el momento de la gestación y se va for- mando durante el primer año de vida para consolidarse a los 2-3 años, sufriendo un
  



































































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