Page 18 - XXIV Monografías en Esclerosis Múltiple
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 FUNDAMENTOS INMUNOLÓGICOS DEL TRATAMIENTO DE LA ESCLEROSIS MÚLTIPLE
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Por su parte, los linfocitos B que producen un número de anticuerpos con especificidades limitado son los linfocitos B-1 y los linfocitos B de la zona marginal(1).
2.3.6. Mastocitos
Los mastocitos contienen un gran número de gránulos que se liberan cuando las células se activan. Dichos gránulos contienen aminas vasoactivas (como la histamina) y enzimas pro- teolíticas. Los mastocitos también sintetizan y secretan mediadores lipídicos (como las prosta- glandinas) y citocinas (como el TNF-α). Además, los mastocitos expresan TLR y sus ligandos pueden ocasionar su desgranulación. A su vez, los mastocitos proporcionan defensa frente a las infecciones por helmintos y son responsables de los síntomas de las enfermedades alérgicas.
2.3.7. Astrocitos
Los astrocitos constituyen las células de la glía más abundantes en el sistema nervioso central y son esenciales para la homeostasis, ya que aportan metabolitos y factores de cre- cimiento a las neuronas, favorecen la formación de sinapsis y regulan los niveles de iones y neurotransmisores. Además, debido a su estratégica localización, los astrocitos forman parte de la barrera hematoencefálica, controlando su permeabilidad y el tráfico de célu- las inmunitarias. En los últimos años se ha descrito que los astrocitos también pueden exacerbar las reacciones inflamatorias o, por el contrario, favorecer la inmunosupresión y la reparación tisular, por ejemplo, mediante la secreción de citocinas y quimiocinas(10).
2.4. MOLÉCULAS EFECTORAS SOLUBLES DE LA INMUNIDAD INNATA
En la sangre y en los líquidos extracelulares hay moléculas solubles capaces de reconocer a los patógenos y de iniciar la respuesta inmunitaria innata. Para ello, llevan a cabo las siguientes funciones: actuar como opsoninas y reclutar a más fagocitos en el foco de la infección. Entre las moléculas efectoras solubles de la inmunidad innata se encuentran el sistema del complemento, las colectinas, las pentraxinas y las ficolinas.
2.4.1. Sistema del complemento
El sistema del complemento está formado por varias proteínas plasmáticas que actúan de forma conjunta para opsonizar patógenos, reclutar fagocitos y, en algunos casos, matar a los agentes infecciosos de forma directa. La activación del complemento se produce mediante una cascada de escisión proteolítica en la cual una enzima se altera y escinde a la siguiente proteína, confiriéndole actividad proteolítica. Así, el primer paso para la activación del complemento es el reconocimiento de moléculas de superficie microbiana. Esto puede ocurrir según 3 vías diferentes: la vía clásica, la vía alternativa y la vía de las lectinas. Estas 3 vías convergen en la formación de la convertasa de C3(1).
En la vía clásica, C1q se une a los anticuerpos adheridos a la superficie microbiana, lo que facilita la activación de C1s y C1r. Estos escinden a C2 y C4, formándose un com- plejo entre los fragmentos C2a y C4b, la convertasa de C3.
En la vía alternativa, C3 reconoce algunos componentes de la superficie microbiana, como el lipopolisacárido. Esto conlleva a su activación y escisión, lo que permite a su vez la escisión del factor B, formándose la convertasa de C3 con los fragmentos C3b y Bb.
   





















































































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